Como ya sabréis, tengo la suerte de vivir en Santiago de Compostela, una ciudad en la que puedo encontrar de todo: jardines, monumentos y un centro histórico que deja a muchos sin palabras. Esto hace que disfrute mucho sacando a pasear la cámara.
Algunas veces (la mayoría) sólo para fotografiar edificios, y otras para captar escenas con gente que me llame la atención. Aunque me gustan ambos tipos de escenas, si tuviese que elegir me quedaría con las primeras. Al volver a verlas me relajan la vista, sobre todo por la calma que transmiten.
Hoy escribo para compartir algunas de estos espacios vacíos. La técnica es sencilla, sobre todo si las haces cuando la iluminación no es demasiado fuerte. Lo complicado es disponer del tiempo hasta que puedes ver la escena sin gente, aunque el resultado vale la pena.
Plaza de Platerías
La primera de ellas es de uno de mis sitios favoritos de Santiago, la Plaza de las Platerías. A partir de mediodía se convierte en un lugar de luces y sombras, así que tuve que exponer con cuidado la escena y hacer algunos retoques posteriores para recuperar detalles en las zonas en sombra. En estos casos es mejor exponer correctamente aquellas zonas con más luz, ya que es más fácil recuperar detalles subexpuestos que sobreexpuestos.
Plaza de Fonseca
Es otro de esos lugares emblemáticos de la ciudad. Aunque en este caso se puede ver alguna persona paseando por la calle que está al fondo, la mayor parte de la escena está vacía, como a mi me gusta. Aquí predominan más las sombras que las luces. Igual que antes, el reflejo de la luz en los edificios del fondo hace difícil exponer bien. Aquí seguí la misma estrategia: exponer en las zonas más iluminadas y luego recuperar detalles de las sombras.
Plaza del Obradoiro: El corazón de Compostela
Finalmente, la Plaza del Obradoiro. Uno de los sitios imprescindibles de esta ciudad. Al atardecer se puede disfrutar de una vista preciosa, tanto desde la terraza del Hostal dos Reis Católicos (que podéis ver en la foto), como desde el lateral del Pazo de Raxoi. Desde allí se puede capturar la silueta de la Iglesia de San Fructuoso. De esta foto me encanta el detalle de las gotas de agua encima de la mesa. Creo que refleja totalmente el espíritu de la ciudad.
Espero que os haya gustado esta entrada. ¡Compartidla para que todos puedan disfrutar de las pequeñas joyas que tenemos en Santiago! ¡Hasta pronto!
Leave a reply