¡Hola de nuevo! Os escribo una vez más para poneros al tanto de qué se ha cocido durante este mes de marzo en mi feed de Instagram. Como ya sabéis, hago una entrada en el blog cada mes para contaros un poco más de mis disparos favoritos. ¡Espero que os parezca interesante!
Jugando con luz
Si hay un tipo de fotografía que me gusta es la que me permite jugar con las luces y sombras. Utilizo mucho esta técnica para resaltar las zonas de la imagen que más me interesan, y el resultado siempre es muy interesante.
Hace unas semanas tocaba fotografía de clave baja en el reto de las 52 semanas que estoy organizando junto a Nucky Dana. Aprovechando el tema del reto decidí desempolvar el tarro de luz que había utilizado para fotos anteriores —la última vez que lo utilicé, en la playa, la tapa se había estropeado por culpa del agua. Mi idea era utilizarlo como fuente de luz, pero dejando en negro el resto de la escena, así que me puse a ello.
Después de unas cuantas pruebas decidí que las manos serían la parte complementaria de la foto. Así podría simular a alguien que se acerca a tocar con temor —aunque también curiosidad e ilusión— la fuente de luz en la oscuridad. Al final el resultado me gustó mucho, y eso que no tenía muchas esperanzas puestas en la foto. Seguramente repetiré con alguna idea similar.
Los tonos oscuros
Desde que cogí la cámara por primera vez, tuve claro que las fotos que más me gustaba hacer eran aquellas con tonos oscuros. No hay ninguna razón en especial para ello, simplemente me gusta la estética y las sensaciones que transmiten estas fotos. Eso tampoco quiere decir que no me gusten las fotos en clave alta. De hecho, he sacado algunas de este estilo que se encuentran entre mis fotos favoritas. Pero si echáis un vistazo a mi feed de Instagram veréis cuál es la tendencia.
En marzo he compartido un par de fotos en clave baja que me han gustado mucho. En invierno las horas de luz escasean, así que prefiero coger la cámara cuando ya se ha puesto el sol y sacar fotos urbanas de larga exposición. Así se consiguen cosas como lo que veis en la primera foto. Me parece muy interesante mezclar el paisaje urbano con las siluetas de personas sentadas o caminando. La presencia de personas en la foto creo que llama mucho más la atención que un espacio vacío, y además ayudan a poner la escala al el resto de elementos de la imagen.
La segunda foto fue tomada durante una pequeña escapada a Valencia. El Mercat Central de la ciudad es uno de los principales puntos de interés del centro histórico, aunque no sólo por el mercado en sí. El edificio que lo alberga empezó a construirse hace 104 años, una construcción de estilo modernista que combina metal, vidrio, columnas y cúpulas. En la foto podéis la actividad de un día cualquiera en el mismo: los turistas paseando, la gente comprando, y la luz mediterránea entrando por la cúpula del techo. La foto está tomada con una lente gran angular, más que nada por la necesidad de poner distancia entre la gente y yo, y porque me apetecía magnificar el espacio de la nave central, que con otras distancias focales más comunes quedaba un poco más deslucido.
¡Y esto ha sido todo por el momento! Espero que os haya gustado el contenido que he subido en marzo a Instagram. Recordad que podéis dejarme un comentario si alguna foto os ha gustado especialmente ☺. Pronto me tendréis de nuevo por aquí, aunque mientras tanto estaré casi todos los día por Instagram. ¡Hasta pronto!
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